22 de febrero de 2011

Coaching y Aprendizaje

Por Dra. Scarlet Kiriloffs de Aguilar (skiriloff@yahoo.com)


"No podemos enseñarle nada a la gente; sólo podemos ayudarlos a que descubran lo que hay en su interior". Galileo Galilei
OLYMPUS DIGITAL CAMERA         Hoy, más que nunca, no podemos conformarnos con saber, sino que resulta cada vez más necesario desarrollar un tipo de aprendizaje vinculado con los profundos cambios en convivencia con las nuevas herramientas educativas y organizacionales que provocan mayor satisfacción. Tal herramienta es conocida como Coaching, definida en la Escuela Europea “como el arte de hacer pregunta para ayudar a las personas a través del aprendizaje, en la exploración y el descubrimiento de nuevas creencias que tiene como resultados nuevos objetivos”.
El coaching es un estilo de conducción, una forma de gestión que facilita el desarrollo de las personas, brinda oportunidades de aprendizaje que provocan la toma de conciencia del propio potencial, ayuda a desarrollar nuevas estrategias de pensamiento y acción, a definir y consolidar metas, potenciando la autonomía y la creatividad. De igual manera, se podrá considerar como la columna vertebral del coaching, las preguntas poderosas como la herramienta central del proceso.
El coaching es un proceso sistemático que facilita el aprendizaje y promueve cambios cognitivos, emocionales y conductuales que expanden la capacidad de acción en función del logro de las metas propuestas. Se trata de una disciplina emergente que trabaja en la facilitación de los procesos de desarrollo de las personas: en la evolución profesional, en los tránsitos de la carrera laboral, en el logro de objetivos, en la disolución de obstáculos para el crecimiento personal y en la búsqueda del mejoramiento de los niveles de rendimiento. En ámbitos organizacionales el coaching se afianza como una poderosa herramienta que potencia el liderazgo, facilita el desempeño y acompaña procesos de capacitación y entrenamiento a los efectos de garantizar la efectiva adquisición de las competencias.
El coaching posee una gran semejanza con el concepto de la Mayéutica acuñado por Sócrates, quien afirmaba que “No puedo enseñarle nada a nadie, sólo puedo hacerlos pensar” y por lo tanto él, como gran maestro, conducía el camino del aprendizaje a través de las preguntas, dejando que sus discípulos o interlocutores fuesen encontrando sus propias respuestas y soluciones a los problemas planteados.
Sócrates denominó Mayéutica a esta metodología de indagación, que quiere decir “arte de las parteras”. Utilizó esta metáfora para señalar la profundidad de esta práctica de indagación, tal cual la concebía. Sostenía que él ejercía un arte parecido al de su madre, Fenáreta, que era comadrona (partera). Decía que las comadronas eran parteras de cuerpos, que ayudaban a dar a luz, pero no daban a luz, mientras que él era un partero de almas, que ayudaba a encontrar las respuestas, pero no daba respuestas.
Este método de indagación a través del cual guiaba a las personas a buscar nuevos sentidos y a reflexionar sobre distintas situaciones buscando otros puntos de vista, es lo más parecido a nuestra concepción del coaching.
El coaching se sustenta en el principio de la autonomía de la persona y está dirigido a que el estudiante asuma plena responsabilidad por sus acciones y por los resultados obtenidos. El coach acompaña y facilita el proceso de aprendizaje y cambio que posibilite al individuo a realizar las acciones necesarias para conseguir los objetivos con los que está comprometido a alcanzar y que no está logrando.

10 de febrero de 2011

Hacia una Acción Educativa Creativa

Por Dra. Doris Ramos R ( dorisjrr@gmail.com)
La supervivencia de la humanidad depende del fomento de la conciencia mundial, de la creatividad, la solidaridad y la cooperación. UNESCO (1996)
Las tradicionales metodologías de enseñanza, sustentadas en la mera información, no se corresponde con los requerimientos socio cultural de nuestro tiempo, menos aún con los principios de construcción del conocimiento, que caracterizan a la realidad educativa nacional. Desde las consideraciones epistemológicas, psicosociales y pedagógicas, es imprescindible la búsqueda de estrategias que conduzcan a un proceso educativo de calidad, cooperación, colaboración y creatividad.
Es por ello, que se requiere, que la acción educativa en su ejecución sea holística en sus metas y propósitos, integradora en proposiciones, adaptativa a contextos, colaborativa y polivalente en el uso de estrategias, es decir, esta debe constituir un acto creativo, constructor y transformador del conocimiento.
En tal sentido, se puede expresar que un proceso educativo innovador abarca actitudes, habilidades y destrezas, manejo de variadas estrategias, prever y superar resistencia, conocer procesos, afrontar conflictos, crear climas constructivos. Así como lo señala De La Fuente (2005).

7 de febrero de 2011

Liderazgo Gerencial

Por Dr. Pedro Palacios Rojas
art -editadoEn la actualidad, ante este mundo de cambios, de globalización y nuevas tecnologías, se han transformado las prácticas de las organizaciones y con ello las habilidades y características que el nuevo entorno empresarial demanda, es por ello que en  sólo las personas, las empresas con visión y liderazgo podrán enfrentar los nuevos acontecimientos. Por ello, conforme se consolida la teoría de la administración y de las organizaciones, ha cobrado fuerza el estudio del liderazgo como una función dentro de las organizaciones. Esta perspectiva no enfatiza las características ni el comportamiento del líder, sino las circunstancias sobre las cuales los equipos de trabajo integran y organizan sus actividades hacia objetivos, y sobre la forma en la cual la función del liderazgo es analizada en términos de una relación dinámica.
Al respecto Gómez (2006), afirma que “el liderazgo guarda una gran relación con las actividades administrativas y gerenciales y el primero es muy importante para lo segundo, el concepto de liderazgo no es igual al de administración ó gerencia“.  Es así que a efectos de diferenciar estos términos, cuando se habla de liderazgo se ha dicho que la mayor parte de las organizaciones están sobreadministradas y sublideradas; ya que una persona quizás sea un gerente eficaz (buen planificador y administrador) justo y organizado, pero carente de las habilidades del líder para motivar. Otras personas tal vez sean líderes eficaces que desatan entusiasmo por doquier, pero carente de las habilidades administrativas ó gerenciales para canalizar la energía que desatan en otros. Por tal motivo, ante los desafíos del compromiso dinámico del mundo actual de las organizaciones,  muchas de ellas están apreciando más a los gerentes que también tienen habilidades de líderes; según esta nueva visión del liderazgo, el gerente líder es resultado de las necesidades de un grupo.
Lo anterior implica que para organizarse y actuar como una unidad, las organizaciones deben elegir líderes o gerentes para dirigir grupos de trabajo, lo cual es un instrumento del grupo para lograr sus objetivos y, sus habilidades personales son valoradas, en la medida que le son útiles al grupo. En este contexto, puede afirmarse que el líder no lo es por su  capacidad o habilidad en sí mismas, sino porque estas características son percibidas por el grupo como las necesarias para lograr el objetivo. El líder adquiere status al lograr que el grupo consiga sus metas, su apoyo resulta en función de qué consigue para los miembros de su grupo, más que ninguna otra persona.
Asimismo, el líder tiene que distribuir el poder y la responsabilidad entre los miembros de su grupo, esta distribución juega un papel importante en la toma de decisiones y, por lo tanto, también en el apoyo que el grupo le otorga. Como el liderazgo está en función del grupo, es importante analizar no sólo las características de éste sino también el contexto en el que el grupo se desenvuelve, ya que se considera que las características del contexto determinan quién se convertirá en el líder del grupo.

1 de febrero de 2011

¿Los Formadores de la Historia del Pensamiento y Filósofos Conocían el Coaching?

Por Dra. Yaritza Vallenilla Ramos (dra.yaritzavallenilla@gmail.com)
clip_image002A lo largo de la historia, el ser humano ha acumulado conocimientos propios de sí mismo, que le permiten hoy, desarrollar una metodología que se conoce como coaching y que sin lugar a dudas, ha venido para quedarse.
Debemos entender al coaching como el producto de una conjunción de conocimientos adquiridos a lo largo de la historia del pensamiento, en concordancia con el desarrollo del potencial de los seres humanos.
A continuación, abordaré con una descripción del término coach, la cual se remonta hacia los siglos XV y XVI, cuando empezó a hacerse muy popular la ciudad húngara de Kocs, situada a unos 70 kilómetros de Budapest, (entre Viena y Pest). Kocs se convirtió en parada obligada para todos los viajes entre estas dos capitales. De la ciudad Kocs, se formó la palabra kocsi (pronunciada cochi). En una obra de Fonseca de 1569, “coche” aparece integrado en el léxico español, según atestigua el Diccionario de Autoridades de 1729.
Es así como la palabra “coach”, derivado de “coche”, cumplía la función de transportar personas de un lugar a otro. El coaching, de cierta forma, también traslada a las personas de un lugar a otro. Es decir, del lugar donde están, adonde quieren llegar. Hoy en día un/a Coach es la persona que te guía y te conduce de un lugar a otro.
En cuanto a los formadores del pensamiento y filósofos de la antigüedad, puede decirse que son varios los personajes que a lo largo de la historia han desarrollado métodos similares a los que el coaching utiliza en la actualidad. Entre ellas podemos citar a: Sócrates, Platón y Aristóteles.